La duquesa Roja ha regresado a la primera plana casi 16 años después de su muerte. Liliane Dahlmann, su viuda (con la que se había casado tan solo 11 horas antes de su fallecimiento pero con la que mantenía una relación de varias décadas), ha sido condenada esta semana por la Audiencia Provincial de Cádiz a seis meses de prisión y a indemnizar al primogénito de Luisa Isabel Álvarez de Toledo y Maura “por un delito de apropiación indebida”, según han explicado los abogados de Leoncio-Alonso González de Gregorio. La duquesa Roja se casó en primeras nupcias con Leoncio González de Gregorio y Martí en julio de 1955.
La aristócrata y el jinete, caballero del Santo Sepulcro y perteneciente al linaje de los Santisteban, hidalgos sorianos, y a la familia de los condes de la Puebla de Valverde, contrajeron matrimonio en Mortera, un pequeño municipio de apenas 2.000 habitantes en Cantabria. Un año después llegaría su primer hijo, Leoncio, actual duque de Medina Sidonia y heredero de los títulos nobiliarios de su progenitora: el marquesado de los Vélez, con Grandeza de España, el condado de Niebla y el marquesado de Villafranca del Bierzo (también con Grandeza de España). En 1957 llegaría la única hija de Luisa y Leoncio, Pilar, y en 1958 nació el tercero de los hijos del matrimonio, Gabriel. El matrimonio duró pocos años, aunque Leoncio no solicitó el divorcio hasta 2005, y los niños quedaron al cuidado de su bisabuela materna.
A pesar de formar parte de una de las familias aristócratas con más abolengo de nuestro país, los nietos de la duquesa Roja siempre han querido mantenerse al margen de los focos y de algunos ni siquiera hay una sola fotografía actual. El primogénito de la también escritora e historiadora, que es profesor asociado en la Universidad de Castilla-La Mancha, Leoncio, se casó en primeras nupcias en diciembre de 1982 en Sanlúcar de Barrameda con Montserrat Viñamata y Martorell, hija de Luis Viñamata y Emmanueli y María de la Concepción Martorell y Castillejo, condes de Alba de Liste. Se divorciaron en 1998 pero antes tuvieron dos hijos: Alonso Enrique, que hoy tiene 40 años, y Soledad, de 34.
Tras el divorcio, Montserrat se mudó a Barcelona con sus dos hijos. Viñamata y Martorell heredó una finca en el Penedés y tras explotarla para la fabricación de vino hizo que fuera la primera mujer en entrar en el Consejo Regulador de esta denominación de origen. El nieto mayor de la duquesa Roja, Alonso, recibió una educación exquisita en Suiza, Francia, Inglaterra e incluso en China. Cursó International Business y Francés en la Lancaster University, hizo un máster en Energías Renovables en la Aalborg Universitet de Copenhague y otro de Tecnologías Sostenibles en la Delft University en Holanda, y completó aún más su formación con otro máster en Planificación de Energías Renovables en la Tsinghua University de Pekín y uno más en Liderazgo y Coaching Organizativo en EADA Business School en Barcelona.
Después de pasar casi dos años trabajando en el grupo de lujo LVMH, donde pasó por el puesto de asistente de Brand Manager y por el de product manager en las sedes de La Chaux de Fonds, en Suiza y, de París del conglomerado, se dio cuenta de que no era feliz siguiendo ese camino profesional. En su casa siempre tuvo una gran importancia el mundo de la educación, ya que su padre es profesor y su madre, licenciada en Derecho y que estudió en el colegio Santa María del Camino de Madrid, por el que pasaron las infantas Elena y Cristina, se ha dedicado siempre a ese sector. Y ahí encontró la felicidad. En 2010 fundó junto a su progenitora The Georgian Manor House, una empresa en la que se da asesoría para poder estudiar en lugares tan prestigiosos como Eton o Harvard.
“La mayoría de niños o adolescentes se inician en un camino que exige del entreno de unas habilidades que no poseen y acaban, en muchos casos, en sectores profesionales que poco tienen que ver con su verdadera vocación. Esta es una vía directa hacia la frustración. Este fue mi caso, y por eso quise crear una empresa que orientara a los jóvenes hacia aquellas profesiones que desarrollaran su talento, y lo más importante: explicarles paso a paso que es lo que tienen que hacer para llegar hasta ahí”, explicaba Alonso a Vanity Fair en una entrevista en 2017. Además, es director de True Horizon desde 2016, una consultora que ayuda a niños, adolescentes y adultos a encontrar su camino y a descubrir sus talentos.
Si la educación es su vocación, entre sus pasiones se encuentra el arte y colecciona piezas antiguas y relacionadas con sus orígenes familiares. En 2012, Alonso ganó la titularidad del ducado de Fernandina contra su tía, Pilar González de Gregorio, que había solicitado la rehabilitación del título, en desuso desde 1850. En 2020, el Consejo de Estado falló a su favor y el Rey refrendó la sentencia, por lo que Alonso es duque de Fernandina.
Su hermana Soledad es quizá la menos conocida de la familia. Apenas se sabe de ella que se casó el 9 de septiembre de 2017 con el consultor francés Jèremy Bégard. El padre de Alonso y Soledad se casó en segundas nupcias en julio de 2001 en Soria con Pamela García Liceaga Damián, nacida en Caracas y con licenciada en Empresariales y Finanzas por la Universidad Católica Andrés Bello de Venezuela.
La segunda hija de la duquesa Roja se casó por primera vez en septiembre de 1977 en Quintana Redonda, Soria, con su primo segundo Rafael Márquez y Osorio, hijo de José Márquez y Álvarez de Toledo, duque de Santa Cristina, y de Rosario Osorio y Díez de Rivera, condesa de la Torres. El palacio de Quintana Redonda es una construcción del siglo XVIII que pertenece a la familia de Pilar desde hace 10 generaciones. Su hijo, José Márquez y González de Gregorio, nació el 12 de julio de 1978. La pareja se divorció en 1987.
Pilar González de Gregorio ocupó la presidencia de la casa de subastas Christie's en España entre 2010 y 2021. Además ha escrito varios libros y ha colaborado como articulista en medios como ABC y El Mundo. Su primogénito, José, es un exitoso empresario que se ha labrado una larga carrera en el mundo de los negocios sobre todo en Estados Unidos. En mayo de 2010 se casó con Edina Zichy Sánchez-Arjona, hija del conde Ymire Zichy de Hich et Vasonykeo y de Teresa Sanchez-Arjona. Al enlace asistieron invitados de renombre como la duquesa de Alba y Alfonso Díez, Jaime de Marichalar junto a su madre Concepción Sáenz de Tejada, Pitita Ridruego o Pedro Trapote junto a Begoña García Baquero. El banquete se celebró en el Real Club Puerta de Hierro. La pareja se separó poco después y en 2018, Vanitatis habló de un supuesto romance del joven con la modelo y dj ecuatoriana Lara Klart, que había sido Miss Mundo Ecuador en 2013.
Tras separarse de su primer marido, Pilar mantuvo una relación con Juan Illán Álvarez de Toledo y Giraud, marqués de Casa Fuerte, padre de Cayetana Álvarez de Toledo y un gran coleccionista de obras de Van Gogh o Monet. Pilar contrajo matrimonio en Madrid el 25 de junio de 1990 con Tomás Terry y Merello. Tomás Terry pertenece a una de las familias de mayor abolengo de Andalucía, ganaderos, bodegueros y dueños del hierro El Bocao con el que han criado a algunos de los mejores caballos de nuestro país. Segundo hijo de los 10 que tuvieron Fernando Carlos de Terry y del Cuvillo y de Isabel Merello Álvarez-Campana (impulsora de la actividad de la Cruz Roja en el Puerto de Santa María), Tomás Terry y Merello es además uno de los nombres clave en la internacionalización del Sicab, el Salón Internacional del Caballo que cada año reúne en Sevilla a lo más granado de la alta sociedad y del sector equino.
Además, Terry fue un gran relaciones públicas y gracia a él comenzaron a asistir al Salón del Caballo sevillano personajes como Sofía Loren, Bo Derek, Charlton Heston o Alain Delon. Del matrimonio nació su único hijo, Tomás Terry y González de Gregorio, que vino al mundo en El Puerto de Santa María el 6 de agosto de 1991. Pese a ser uno de los jóvenes aristócratas más discretos, Tomás participó en el Baile de Debutantes en 2013 en París y allí coincidió con una de sus buenas amigas, Cósima Ramírez, hija de Pedro J. Ramírez y de la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada. En Le Bal, el hijo de Tomás Terry fue compañero de baile de Leonora Gilmour, bisnieta del duque británico de Buccleuch y sobrina del duque de Northumberland.
El joven, de 32 años, estudió Derecho en ICADE, en Madrid, y más tarde completó su formación en Ciencias Políticas en el Sciences Po de París, una institución de educación superior por la que han pasado siete presidentes franceses como Emmanuel Macron, 13 primeros ministros franceses, 12 jefes de Estado o de Gobierno extranjeros y seis de los actuales directores ejecutivos de las empresas más grandes de Francia. Tras terminar su formación, el hijo de Pilar Medina Sidonia se marchó a Nueva York para llevar a cabo unas prácticas laborales en la organización World Monuments Fund, dedicada a la preservación de sitios de arquitectura histórica y patrimonio cultural de todo el mundo. Esta experiencia le sirvió para conocer de primera mano el sector y poder ocuparse del patrimonio familiar en la actualidad.
De las pocas ocasiones en las que hemos visto a Tomás Terry fue en la boda de Álvaro Falcó e Isabelle Junot en abril de 2022. Asistió junto a su padre, que era un gran amigo del fallecido marqués de Cubas y había estado presente cuatro décadas antes en el enlace de Fernando Falcó con Marta Chávarri, padres del novio, en el mismo palacio del Marqués de Mirabel. Tras su divorcio de Tomás Terry, Pilar Medina Sidonia se casó de nuevo con el pianista Joaquín Soriano en 2000 y se separaron unos meses después.
