FLORES

Estas son las 12 flores que definirán cada mes del año

Por su simbología, significado o floración, hay tantas posibilidades de hacer una clasificación de flores para el año como ganas de tener en casa alguna. Pero cada mes tiene una, y son éstas.

Las flores también tienen sus significados, se asocian con estados de ánimo y hasta se asocian a diferentes meses del año. Es algo parecido a lo que sucede con los signos del zodíaco, en ellos influyen astros y estrellas y depende de cuándo y dónde, nos definen. Pues con las flores es similar, hay una flor con la que tiende a identificarse a cada mes del año, y en AD hemos querido saber cuáles son. Toma nota de las 12 flores que se asocian a cada mes del año. Igual puedes darle una vuelta de tuerca y unirla a tu signo según cuándo hayas nacido. Qué nos gusta enredar con flores en esta redacción.

Enero: el clavel

Enero y clavel son sinónimos. Y es que esta flor tiene multitud de significados según el color, ya sabes, rojo significa amor, rosa un nunca te olvidaré, blanco amor puro, amarillo decepción o desengaño… Y como enero es el primer mes del año, una hoja en blanco, necesita una flor que puede significar todo y nos ponga en nuestro sitio para saber por dónde seguir.

Febrero: iris y violetas

Para febrero nos hablan de dos, iris y violetas. Ambas flores tienen significados asociados a la fe, la esperanza, sabiduría, confianza, lealtad y fidelidad. Ya han pasado 30 días, hay que creer que el camino que hemos elegido es el correcto, o al menos el que consideramos mejor, y debemos mantenernos firmes en esos propósitos.

Marzo: narcisos

Marzo es amarillo, como los narcisos. Esta flor se asocia a la prosperidad y la felicidad, el renacer a la vida y los nuevos comienzos. Es el mes de la primavera y con ella, el nacimiento de ilusiones. Si bien es cierto que el mito de Narciso tiene ese punto ególatra, no deja de ser una forma de querernos a nosotros mismos. Y para que dé buena suerte si se regala, que sea en ramillete, pues uno solo es mal augurio.

© D.R.

Abril: margaritas

En abril aguas mil y también margaritas. Inocentes, puras, sencillas pero alegres, quien más quien mejor ha deshojado alguna en busca del amor verdadero. Por cierto, ¿sabías que hay una leyenda que dice que el Azar es el nombre de un duende, que va por ahí quitando pétalos a las margaritas para confundir a los enamorados? Ojo con lo que te contestan si preguntas a sus hojas. Lo mejor es dejarse llevar por la ilusión, y un ramo de margaritas ilusiona a cualquiera.

Mayo: lirios

Mayo es puro e inocente, como los lirios. No en vano es el mes de las flores. Y por encima de todas, es esta preciosidad la que todos están de acuerdo en asociar con este mes. Era una flor muy venerada por los griegos, que creían que brotaba de la leche de Hera, reina de las diosas, e incluso se ha asociado con la Virgen María. Mitos aparte, se presentan en multitud de colores y lo confesamos, nos gustan todos.

Junio: rosas

Y con junio llegan las rosas. Si bien es cierto que se trata de una flor muy rica en simbología y que cada color tiene un significado distinto así como el número que debe llevar un ramo o en solitario, lo que es cierto es que representa la belleza, la perfección, la salud y riqueza, y es algo así como la felicidad perfecta. Es decir, el estado de ánimo óptimo para dar comienzo al verano.

Julio: delphinium

Una planta mágica, que puede dar y quitar la vida, es la que simboliza el mes de julio. Y se llama delphinium. Durante muchos años ha sido usada como planta medicinal o como veneno (ahora entiendes lo de dar y quitar la vida). Pero además, se dice que atrae a la música y a las buenas vibraciones, tiene un olor fantástico que sugiere, según los expertos, “ligereza y desenfado”. Estado de ánimo perfecto para vivir un verano intenso.

Agosto: gladiolo

La flor de agosto es el gladiolo, lo dicen todos. Esta planta destaca por las flores florecen a ambos lados del tallo en colores como blanco, rojo, amarillo, morado, naranja, rosa. Como curiosidad te podemos contar que procede la palabra latina gladiolus, diminutivo de gladius y que significa espada. Esto hace referencia a la forma de la hoja pero también, al hecho de que era la flor que se entregaba a los gladiadores que triunfaban en la batalla. Y muchos la asocian con el enamoramiento. ¡Ay esos amores de verano que en agosto se intensifican!

Foto: re novatio para Unsplash

Septiembre: aster

La buena estrella guía septiembre. Porque la flor de este mes es el aster, nombre que deriva del término griego que significa estrella y que hace referencia a la forma de la cabeza floral de esta vistosa y deliciosa flor. En la antigüedad se creía que si se quemaban sus hojas, su perfume ahuyentaba todos los males. Simboliza paciencia y es sinónimo de elegancia. Es decir, todo lo que necesitamos para afrontar el fin del verano a la vuelta a muchas de nuestras rutinas.

Octubre: caléndula

Un signo de optimismo y prosperidad es la caléndula, la flor de octubre. Sus grandes flores de color naranja representa el afecto y es imposible estar desanimado a su lado porque su estallido de alegría nunca deja indiferente. Y los romanos y griegos la utilizaban para curar enfermedades. Si es que todo son ventajas teniendo una (o más) en casa.

Noviembre: crisantemo

Para los amantes de las flores, noviembre es sinónimo de crisantemo. Para nuestros antepasados, esta flor era sinónimo del sol, para los japoneses representa la perfección, para Confucio eran objeto de meditación, y así hasta que se acabe el artículo. Significa optimismo, felicidad y alegría, y si tenemos en cuenta que nos acercamos a diciembre y final de año, es perfecto para que nos invadan todos esos estados de ánimo.

© Getty Images

Diciembre: poinsettia

Se acaba el año, llega diciembre y con él la poinsettia. Este nombre ya no te resulta ajenos, pues nos referimos a la flor de pascua. Estallido de color, se relaciona con el éxito y la buena suerte, su aroma es inconfundible y queda DIVINA como elemento fundamental en la decoración navideña de nuestra casa. ¿Qué más quieres?

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