Qué ver en Cartagena (España)

¡Hola viajeros! Aquí os dejo una guía muy completa sobre qué ver en Cartagena, esta increíble ciudad que deslumbró en época romana y actualmente ofrece un patrimonio histórico envidiable. Con más de 3000 años de historia, esta ciudad portuaria de la Región de Murcia ha destacado durante siglos por su importancia en el Mediterráneo, siendo hoy en día un destino donde contemplar una bonita arquitectura y restos arqueológicos únicos.

Cartagena muestra a sus visitantes un pasado lleno de culturas: cartagineses, romanos, árabes, todos han dejado su huella en la ciudad que, tras una época medieval más discreta, recuperó su importancia naval y militar, y acabó sufriendo las consecuencias de la Guerra Civil. Todo esto es lo que muestra la ciudad para quien se anime a descubrirla, y en este post sobre qué ver en Cartagena podrás encontrar la mejor guía para ello.

En la ciudad de Cartagena encontrarás monumentos que representan prácticamente todas las épocas históricas. Comenzando por su origen, este no es romano como mucha gente piensa, sino que la ciudad fue fundada por el general cartaginés Asdrúbal sobre el año 227 a.C., que vislumbró su privilegiada ubicación estratégica como puerto natural al Mediterráneo y custodiada entre colinas. Esta ciudad fue llamada Qart Hadasht, y desde aquí es desde donde el famoso Aníbal partió con sus elefantes para intentar arrasar Roma.

Sin embargo, aunque la ciudad experimentó un desarrollo importante durante este dominio cartaginés, unos años más tarde fue conquistada por los romanos, empresa llevada a cabo por Escipión el Africano gracias a un ataque combinado por tierra y mar que cogió desprevenidos a sus defensores. La ciudad pasó a ser conocida como Carthago Nova, y este periodo romano el que más patrimonio ha dejado en la ciudad de Cartagena.

Durante siglos posteriores pasó por manos de bizantinos, visigodos y árabes, hasta que fue tomada finalmente por Alfonso X el Sabio, en el año 1245. En la Edad Media la ciudad perdió esa importancia que la caracterizó durante siglos pasados, hasta que llegó la Edad Moderna y se convirtió en un importante puerto para el comercio con América. En el siglo XVIII, Carlos III influyó en este resurgir de Cartagena al designarla capital del Departamento Marítimo del Mediterráneo, construyéndose algunas fortificaciones en la bahía y un arsenal para la Armada, algo por lo que destacaría Cartagena hasta nuestros días.

Ya en la Guerra Civil, Cartagena fue una importante base de la flota republicana, de hecho sería la penúltima ciudad en caer en manos del bando nacional. Durante estos años la ciudad sería bombardeada por los aliados italo-alemanes del bando nacional, utilizando Cartagena incluso como campo de pruebas previo al famoso bombardeo de Guernica por la legión Cóndor.

Actualmente, Cartagena continúa siendo una importante ciudad portuaria con un gran patrimonio y monumentos destacados que han dejado las diversas civilizaciones que pasaron por ella. Es por ello que se le conoce turísticamente como Puerto de Culturas.

Tras este breve resumen histórico, comenzamos con este post de qué ver en Cartagena.

La visita que realicé a Cartagena duró 2 días, para ver toda la oferta turística de la ciudad y algunos lugares de los alrededores. No obstante, en caso de disponer de un días solo es cuestión de seleccionar aquellos lugares que te interesen para ver en Cartagena.

El primer día lo dediqué principalmente al patrimonio romano que ofrece Cartagena, además de ver un poco el centro y el paseo marítimo.

Empezamos por la sede del Ayuntamiento de Cartagena, el Palacio Consistorial. Éste es uno de los principales edificios modernistas de la ciudad que destaca por su fachada de mármol blanco y las características cúpulas de zinc.

Fue construido a principios del siglo XX, con el boom modernista que vivió Cartagena y se puede visitar el interior si se reserva una visita guiada que dura una media hora (tanto por teléfono como allí mismo) y merece la pena para subir por la impresionante escalera de mármol y entrar a algunas dependencias.

Al lado del Palacio Consistorial encontramos la Plaza de los Héroes de Santiago de Cuba y Cavite, con una fuente-monumento en conmemoración a los españoles que lucharon en la Guerra de Cuba. También por esta zona se encuentran dos esculturas muy famosas de Cartagena, el soldado de reemplazo sentado en un banco, y al lado del Palacio Consistorial la del marinero de reemplazo, homenaje a aquellos que llegaban a Cartagena para cumplir el servicio militar. Como curiosidad, junto al marinero de reemplazo se encuentra una placa con los principales acontecimientos históricos de Cartagena.

El teatro romano de Cartagena es sin duda el principal atractivo arqueológico de la ciudad, y en caso de tener que quedarme con visitar un único lugar (a riesgo de no parecer original) sería este, ya que es de los mejores restos arqueológicos que podemos encontrar en toda la Región de Murcia.

Este teatro romano (no confundir con anfiteatro o enfadaréis a los guías) es uno de los mejores ejemplos del paso de los romanos por la ciudad. Fue construido en el siglo I a.C., en tiempos del emperador Octavio Augusto, y tenía una capacidad para 7.000 personas. Su conservación es fantástica, por lo que transportarse a esa edad antigua es muy sencillo al pasear por sus gradas.

En la entrada se incluye tanto la visita del teatro como el previo paso por el museo (Museo del Teatro Romano de Cartagena), donde se pueden ver piezas que han sido encontradas en la zona y aprender un poco sobre las curiosidades de esta obra pública. Es súper recomendable enterarse de cuando realizan las visitas guiadas (incluidas en la entrada) y hacer la visita con un guía.

La conocida como Catedral de Santa María o Catedral Vieja, pese a que nunca fue nombrada como tal, fue la iglesia más importante de Cartagena hasta que los bombardeos de la Guerra Civil la dejaron prácticamente destruida. Debido a esto, la diócesis fue trasladada definitivamente a la ciudad de Murcia.

En la visita al teatro romano, justo en el corredor que conecta el museo con el teatro, se pasa a través de un túnel por debajo de las ruinas de este edificio. Si os salta la duda, la “catedral” no es la más antigua de España ni fue construida antes de la llegada del imperio romano (un error que escuché es muy común).

La visita al barrio del foro romano permite ver cómo se desarrollaba la vida romana en este conjunto de templos y termas. Otro lugar impresionante si te gusta la arqueología que no te puedes perder, ya que te da la oportunidad de pasear por las antiguas calzadas romanas de Carthago Nova, y mejor también si consigues hacerlo con una visita guiada.

El complejo termal está muy bien conservado, y se pueden ver los restos de otros edificios donde se celebraban banquetes o de un templo muy bien conservado.

En una de las colinas de Cartagena, justo de tras del barrio del foro romano, se encuentra este parque que esconde restos arqueológicos desde la época de las guerras púnicas. Sin embargo, el principal aliciente de subir hasta este sitio son las vistas panorámicas que hay de la ciudad, ya que los restos apenas han sido excavados.

Se piensa que en esta zona el general cartaginés Asdrúbal (recuerda que fue el fundador de la ciudad y también era familia del famosos Aníbal), se construyó en el Molinete un palacio que sería el más grande y espectacular del Mediterráneo, único en aquella época. Esto se sabe por haber leído sobre este palacio en escritos, ya que las labores arqueológicas todavía no han dado con su ubicación exacta.

Aquí puedes encontrar los restos de un templo dedicado al primer emperador romano Octavio Augusto, que fue una de las zonas importantes de Carthago Nova. El lugar no impresiona como los anteriores que he descrito, aun así la visita es interesante y si compráis el abono completo no me lo perdería.

Antigua vivienda romana de una familia acomodada, de la que se piensa se dedicaba al comercio de vino. Aquí se pueden ver los restos de diferentes estancias que formaban la vivienda y admirar algunas de sus pinturas y mosaicos, entre los que destaca el cisne, esvásticas y flores.

El nombre de la casa se apropió de la inscripción  “fortuna propitia” o buena suerte que se encontró en el suelo de uno de sus pasillos (se puede leer perfectamente).

Dejamos atrás los restos romanos, y visitamos otros previos a su llegada. La muralla púnica fue la defensa que mandó construir Asdrúbal en Qart Hadast para fortificar completamente la ciudad, algo que fue de vital importancia durante la Segunda Guerra Púnica contra los romanos, a pesar de que finalmente estos consiguieron tomar la ciudad.

En este museo se puede ver un vídeo sobre los orígenes de la muralla y la estrategia que usó Escipión para tomar aquella ciudad inexpugnable. Después se pueden ver una mínima parte de la muralla, uno de los pocos restos cartagineses que hay en la península.

También se puede entrar a la cripta de la ermita de San José, del siglo XVI, construida junto a la muralla y con sus paredes decoradas por unas macabras pinturas.

Llegamos al puerto de Cartagena, que como hemos comentado ha sido de vital importancia para la ciudad durante toda su historia. Aquí destaca una escultura llamada El Zulo, un hombre gigante agazapado obra de Víctor Ochoa, en recuerdo a las víctimas del terrorismo.

Muy cerca hay otra escultura de una cola de ballena que emerge del mar, y si paseamos hasta el otro extremo podemos ver El Batel, edificio que se utiliza actualmente como auditorio y palacio de congresos.

El Museo Nacional de Arqueología Subacuática, un lugar donde se pueden encontrar restos de tesoros hundidos, fósiles de en las profundidades del mar, y hasta uno de los dos barcos fenicios que se descubrieron en los fondos de Mazarrón, los más antiguos hallados en el Mediterráneo.

En el puerto también se encuentra la taquilla del barco turístico, que da un paseo por la bahía de Cartagena a la vez que explica la creación de las baterías militares para la defensa marítima de la ciudad. Básicamente, gracias al fuego cruzado entre los distintos fuertes el acceso a la bahía era prácticamente imposible. El paseo es muy agradable y merece totalmente la pena.

Si se adquiere otra entrada aparte (o el abono completo), se puede parar en el Fuerte de Navidad para explorar su interior y aprender cómo era la vida militar en estas fortalezas. Cuando termines puedes dar un paseo hasta el bonito faro rojo y blanco que hay en uno de sus extremos, estando pendiente de cuándo pasará el siguiente barco para terminar el recorrido.

Durante los meses de verano, se realizan en Cartagena distintas actividades que seguro pueden completar tu visita de la ciudad de una forma muy original. En mi caso realicé la de “Música al atardecer desde el mar” que es un paseo en barco con música en directo para contemplar la puesta de Sol y, a la vuelta, Cartagena iluminada desde el mar.

Museo levantado sobre una antigua necrópolis tardo-romana, ideal para hacer un recorrido por las diferentes épocas con los restos encontrados en Cartagena y alrededores, desde el Neolítico hasta la Edad Moderna. Destaca la colección de epigrafía funeraria, minería romana y las cerámicas. El museo consta de dos plantas, y una sección de la planta superior está dedicada a exposiciones temporales.

Enorme museo dedicado a una de las mayores colecciones de municiones y artillería del siglo XX que se puede ver en España. Consta de dos plantas, comenzando el recorrido por la sala de cañones (hay muchísimos tipos), para pasar a una sala de municiones y artillería antiaérea. También hay piezas que se sacaron de las baterías de costa y una colección de miniaturas.

Al pasear por la Calle Mayor de Cartagena llama la atención las fachadas modernistas de algunos de sus edificios más emblemáticos. Tras la caída del cantón de Cartagena durante la Primera República, los daños causados por las explosiones fueron tapados con una espléndida arquitectura. Algunos de los edificios que podemos ver de este estilo son el Gran Hotel, el Palacio Consistorial, Casa Cervantes, Casa Maestre, Palacio Aguirre, Casa Zapata o Casa Dorda.

Este museo cuenta con distintas salas y piezas de barcos, objetivos de navegación, banderas o uniformes. Una de las cosas más destacadas es la réplica del submarino Peral. Isaac Peral construyó este prototipo antes de que el submarino tal y como lo conocemos fuera creado, pero no recibió el apoyo necesario y terminó abandonado en un almacén.

Llama la atención por su fachada amarilla y la estatua del soldado que hay en su puerta principal.

Algunas iglesias con un exterior más que destacable son la Basílica de la Caridad o la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús.

Otro edificio modernista pero que en su interior guarda el Museo Regional de Arte Moderno, con obras desde finales del siglo XIX hasta la actualidad, y trabajos de artistas de gran nivel como Dalí, Tapies o Chillida.

Una de las construcciones que realizó este monarca para terminar de fortificar la ciudad, que en esa época (mediados del siglo XVIII) ya era un enclave militar importante. En esta época la muralla daba directamente al mar y rodeaba totalmente el casco antiguo de la ciudad.

Este museo se ubica en una de las antiguas galerías que usaron los habitantes de Cartagena para protegerse de los bombardeos durante la Guerra Civil. Como he contado en la historia, Cartagena fue una ciudad muy castigada por los bombardeos aliados del bando nacional, por ello fue necesario construir refugios antiaéreos por toda la ciudad para proteger a la población.

En el que se encuentra el museo tuvo capacidad para más de 5.000 personas, ahora se pueden recorrer algunas de sus galerías para aprender sobre este tramo de la historia nada agradable. Si te decides a hacer la visita guiada seguro que es un acierto.

Tras visitar el museo anterior, se puede subir al Castillo de la Concepción por el ascensor panorámico (2€ o incluido en los bonos) o bien andando, podemos contemplar el anfiteatro (o la plaza de toros bajo la que se encuentra esta vez sí, el anfiteatro).

Y llegamos a otro imprescindible de Cartagena, el Castillo de la Concepción, que en su interior cuenta con el Centro de Interpretación de la Historia de Cartagena. El cerro de la Concepción fue un lugar de importancia estratégica para controlar uno de los puertos más importantes del Mediterráneo. El castillo se construyó en el siglo XIII por orden del rey Alfonso  el Sabio, sobre la alcazaba árabe recién conquistada, para servir de punto de vigilancia sobre la ciudad y la bahía.

Dentro del Castillo se puede visitar el Centro de Interpretación de la Historia de Cartagena, perfecto para descubrir algunas etapas de su historia no tan conocida como el periodo medieval. En la entrada nos recibe la estatua de Asdrúbal, que ya es un conocido para nosotros, y al final del recorrido subimos a la azotea, un mirador fantástico para poder ver todos aquellos lugares comentados que han marcado la historia de Cartagena.

Terminamos hablando de este bonito parque que rodea al Castillo de la Concepción, aquí podemos asomarnos a varios miradores donde contemplar el fabuloso teatro y el puerto por última vez.

Aunque lo más curioso es que a este lugar se le conoce como el parque de los patos, ya que hay varios de estos animales en el estanque y sobre todo muchos pavos reales.

Terminada la visita a la ciudad de Cartagena, te comento algunos lugares que hay muy cerca de allí por si te apetece darle la oportunidad a un parque de aventuras, un extraño poblado o una de las mejores calas de España.

• Parque Tentegorra. Un parque de aventura con tirolinas, piscinas, láser tag y un laberinto impresionante. Este lugar que se encuentra a escasos minutos de Cartagena ofrece actividades al aire libre para todos los gustos. Visita su página web para más información.
• Cala Cortina. Muy cerca de Cartagena se encuentra esta playa que ha sido considerada de las mejores de España (consiguió el 2º puesto hace unos años, casi nada). Sus aguas tranquilas y transparentes invitan a pasar una tarde para relajarse o practicar snorkel. No te pierdas el mirador que hay antes de entrar a la cala, desde allí la puesta de Sol es increíble.

Para visitar Cartagena adquirí un bono que ofrece en su página web “Cartagena Puerto de Culturas”, sin duda es la mejor opción si quieres ver la gran parte de monumentos y museos que tiene la ciudad, además de que incluye alguna actividad muy interesante.

¿Qué monumentos incluye? Primero comentarte que tienes la opción de adquirir el abono completo que incluye toda la oferta de Cartagena Puerto de Culturas, o en caso de que te interesen solo unas pocas atracciones hay abonos a la carta de varios tipos para seleccionar museos concretos.

En mi caso utilicé el abono completo, este incluye: Museo del Teatro Romano, Barrio del Foro Romano, Muralla Púnica, Augusteum, Casa de la Fortuna, Castillo de la Concepción, Fuerte de Navidad, Museo-Refugio de la Guerra Civil, Ascensor panorámico, Barco turístico y Bus turístico.

Cartagena tiene unos lugares para comer increíbles, si ya has leído algún otro post de mi cosecha sabrás que la gastronomía es algo que valoro mucho de un lugar y tengo que reconocer que en Cartagena comí muy bien.

La Posada de los Habaneros

Un sitio increíble para comer, todo estaba delicioso y hay platos muy originales. Cuentan con menús que también son muy interesantes. Aunque el precio será más alto que si comemos de tapas en otros lugares de la ciudad, te recomiendo mucho este lugar.

Web | TripAdvisor

Tasca del Tío Andrés

Algo más económico que el lugar anterior, la comida está muy buena aunque algunas tapas no son muy abundantes, pero se come también muy bien.

Web | TripAdvisor

No puedo acabar este apartado sin nombrar el Café asiático, un café mezclado con leche condensada, brandi y licor 43, con un toque de canela y corteza de limón, apetece a cualquier hora del día.

Vamos ahora con las fiestas de Cartagena que no te debes perder:

• Cartagineses y romanos. Estas fiestas, declaradas de Interés Turístico Internacional, se celebran en la ciudad de Cartagena durante la segunda quincena de septiembre, para conmemorar los hechos históricos que tuvieron lugar en Cartagena durante la Segunda Guerra Púnica. Comienzan con un desembarco para conmemorar la toma de la ciudad por las tropas romanas, dando lugar a una semana festiva en la que se alternan los días dedicados a ambos bandos. Se recrea la boda de Aníbal, espectáculos en un circo romano, con sus gladiadores, para terminar en el gran desfile del sábado.
• La Mar de Músicas. Cada mes de julio se celebra el festival La Mar de Músicas en Cartagena.

En este mapa tienes todos los lugares de Cartagena que hemos ido comentando en el post, desliza arriba a la izquierda para ver la leyenda del mapa y los lugares que visité cada día, así como los restaurantes en los que comí y otros recomendados.

Y hasta aquí esta guía de qué ver en Cartagena, una ciudad impresionante por la que han pasado multitud de culturas y donde revivir una historia que ha marcado varias épocas.

Espero que te haya resultado interesante esta guía y te animes a visitar Cartagena, si ya lo has hecho ¿qué te ha parecido?

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