¿Cuál es tu excusa para no innovar?

Son las 7:30 am. La alarma del teléfono suena por tercera vez y yo postergo por otros diez minutos el momento de despertarme. Igual que las dos veces anteriores, es admirable la velocidad con la que encuentro una razón que me permita esquivar el arduo desafío de despertarme. Excusas.

Una excusa es una argumento que se da para justificar un error o un comportamiento. Si el título de este artículo llamó tu atención, es posible que seas de aquellos que encuentran excusas para no innovar tan fácilmente como yo las encuentro para no levantarme temprano. ¿Debatimos algunas?

Excusa 1: “No puedo innovar porque no soy creativo”

La innovación es creatividad en acción. En ese sentido, no creo que sea incorrecta la noción de que es necesario ser creativos para ser innovadores. Sin embargo, sí estoy dispuesto a discutir la idea de que la creatividad es una característica reservada para algunos elegidos. 

En Wolox, junto a nuestros clientes, trabajamos con muchas técnicas, ejercicios y herramientas como Sci-Fi Design Intelligence o Forward Thinking, entre otras, que incentivan la generación de ideas. Así he comprobado que la creatividad, ante todo, es una cuestión de actitud.

Nunca pensé en mí como lo que habitualmente se conoce por persona creativa. Sin embargo, tengo una mezcla de fascinación y admiración por esos perfiles. Son esas emociones las que me llevaron a analizar su comportamiento y validarlo, luego, en numerosa bibliografía. Algunos patrones que vale la pena destacar son:

• Crean espacios diferentes, tanto en el plano físico como emocional.
• Se sienten a gusto con el error.
• Usan herramientas y procedimientos, en algunos casos con ingenieril rigurosidad.
• Comparten sus momentos de creatividad.
• Disfrutan de la capacidad creadora del resto.

Ninguno de estos comportamientos parece estar fuera de alcance para los demás. Quizás solo se trate de darle una chance. 

En la forma que yo lo interpreto, esta idea de no tener el talento creativo no obedece a una habilidad o capacidad en particular, sino que apunta fundamentalmente a la percepción que tenemos de nosotros mismos.

La innovación requiere de confianza. Confianza en uno mismo y confianza en los demás. Aceptar nuestras condiciones, y la idea de que todos pueden aportar algo al proceso creativo son algunas de las claves para que la innovación suceda.  

Excusa 2: “No puedo innovar porque no tengo ninguna idea”

Newton y su manzana; Arquímedes, su bañera y ese momento eureka son sólo algunos ejemplos de por qué tenemos tan arraigada la noción de que la innovación proviene de una idea genial que cambia el mundo y la forma en que nos vinculamos con él. 

No esperes a tener una gran idea de repente. En mi experiencia recién a las 50-60 ideas sobre un tema empiezan a salir las que son realmente buenas. Esto se debe a que nuestro cerebro está preparado para buscar primero lo que es más accesible y solo cuando rechazamos todas esas opciones se toma el trabajo de buscar en los rincones de nuestra mente.

¿Cuántas malas ideas deben haber tenido Newton o Arquímedes antes de su momento eureka? La mejor forma de tener una buena idea es descartar muchas. 

Excusa 3 “No puedo innovar porque no tengo los recursos”

Hay muchas formas de pensar esta excusa. Quizás la más simple sea preguntarte ¿Cuánto perdió Blockbuster por no innovar? O dicho de otra forma, ¿Qué tan relevante puede ser la inversión que hizo Netflix para salir del modelo de distribución de DVDs y pasar al streaming, a la vista de la valuación actual de la empresa? 

Se dice que nunca en la historia fue tan barato innovar. La metodología Lean StartUp nos invita a fallar rápido y barato. Todos los días, se crean miles de nuevos emprendimientos en formato de cuentas de IG, canales de YouTube o Landing Pages. 

En este punto, es importante entender que innovar no significa necesariamente estar a la vanguardia en lo que refiere a tecnología. Blockchain, Big Data, IoT…Un montón de conceptos increíblemente interesantes, pero que no dicen nada si no vienen acompañados de una buena estrategia. Una de las premisas fundamentales del servicio de Digital Business Design en Wolox es tener un enfoque holístico que trabaje sobre la intersección de 3 ejes: el comportamiento de los usuarios, la situación del negocio y la factibilidad tecnológica. 

La tecnología cumple un rol fundamental como habilitadora de la innovación pero no siempre el camino es usar lo último sino identificar lo más conveniente para el estado de evolución de tu industria y las necesidades de tus clientes.

Excusa 4 “Mi idea es demasiado buena, no necesito preocuparme por su ejecución”

Esta es quizás la idea que más procesos de innovación ha destruido. La creatividad es una parte importante de la innovación pero no son sinónimos. Ni siquiera la primera es requisito para la segunda. La innovación lleva implícita una visión hacia el logro, es creatividad en acción. Recuerdo una conversación con el founder de un importante Venture Capital latinoamericano: “nunca invierto en una idea, siempre en el equipo, porque es la ejecución la que define el éxito de un emprendimiento” (o de un proceso de innovación, agrego yo). 

En conclusión, son 4 los conceptos claves para afrontar un proceso de innovación:

1. Todos tenemos algo para aportar al proceso creativo.
2. Hacen falta muchas ideas para tener una buena idea.
3. Falla rápido, falla barato, pero inténtalo.
4. Una buena ejecución le gana a una buena idea.

Ya son las 11.30 pm así que mejor voy yendo a la cama para enfrentar mejor mi desafío de levantarme temprano. ¿Y tú? ¿Qué excusas tienes para no accionar frente a los desafíos actuales? ¿Qué estás haciendo para afrontarlos?

En Wolox, desafiamos todas las excusas para acompañar a nuestros aliados en la creación de soluciones digitales que les permitan hacer de la innovación una pieza central de su negocio. Si quieres saber más sobre nuestros procesos de innovación, ¡síguenos!