Miguel Gonzales: “Escribir y enseñar es mi pasión”

Con una capacidad permanente de contar historias, el escritor Miguel Gonzales es de aquellos que, sin querer figurar demasiado en el mundo literario, tiene una constancia demostrada al no detenerse al momento de escribir y enseñar, como son explica en esta entrevista.

¿Fue difícil para ti decidirte por escribir? Al inicio, un poco. Todo ese mundo de la literatura lo descubrí en el primer año de Universidad en Literatura. Me sentí atraído por Borges y los escritores de La nueva novela hispanoamericana, incluyendo el Boom. Quería ser como ellos, pero luego descubrí otro camino mientras iba leyendo más, diferentes tipos de narrativa, hasta que descubrí un estilo propio en mis mis cuentos y novelas.

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Tienes una trilogía de novelas arequipeñas ¿Cómo fue su proceso? Una de mis lecturas favoritas es la novela histórica. Cuando tuve en mente escribirla, la maduré un año y medio, seis meses en la Biblioteca Pública Municipal – Ateneo- investigando algunos detalles para escribir los capítulos y cobre vida las partes de esta ficción y su redacción me llevó un año. Es una historia que va desde los pobladores Puquina y su capital Churajón a través de la época incaica, virreinato, república y termina con dos personas que hablan de ese pasado en el Mall de Lambramani. La tuve guardada como año y medio hasta que un amigo, José Luis Rivera, quien también estudió Literatura en la UNSA, tuvo un periódico, «La espada del libertador», vio ese proyecto y sin pensarlo hizo lo imposible para su publicación en tres tomos desde 2016 hasta 2018. Ese fue mi último libro y mi cuarta novela.

Tu última novela que publicarás trata sobre un tema de actualidad y que ha quedado finalista en un concurso. Sí. Está a cargo de Zentauro Ediciones. Es una obra que fue y es parte de mi experiencia personal. Actualmente, trabajo en el asentamiento minero de Secocha que pertenece a Camaná. Me impactó, la primera vez que llegué allá, la forma de vida, el pueblo y la sociedad. No imaginaba hasta entonces que personas vivieran así. Averigüé sobre la historia del pueblo, hay muchos detalles que descubrí, como investigador, al estilo de la novela histórica, tal como te comenté. Es una novela que retrata cómo son las personas que se ven envueltas en el trabajo de la minería informal y la parte fantástica está en la figura de un personaje fantasmal que tiene relación con los duendes… Efectivamente, es una novela que salió finalista en un concurso en España, en la región iberia de Tugia en el sur. En ese entonces, tuvo el nombre de «Tierra de perdición». Hoy está pronta a salir lleva otro título.

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Eres también docente, ¿En qué ayuda realmente a un escolar aprender sobre literatura? Lo mejor que le puede pasar a un estudiante es que su propio profesor sea escritor porque comparte experiencia, no exactamente de un libro, sino con el aprendizaje de la literatura junto al oficio de su maestro. Se puede leer textos propios con ellos y enseñarles la literatura desde dentro de la experiencia.

¿Cuáles son tus próximos proyectos? Siempre que terminó un proyecto ya tengo otro en mente que voy madurando paulatinamente. Cuando se haya publicado mi novela, tengo en mente escribir dos, pero no sé cuál empezar. Cuando haya alguna decisión, empezaré por alguna.